Qué visitar, ver y hacer en un viaje safari por Uganda, África: Rhino Fund Uganda, Parque Nacional de las Cataratas Murchison, el Nacional de Kibale, Parque Nacional de la Reina Elizabeth (Queen Elizabeth Park), el Nacional de la Selva Impenetrable de Bwindi, etc.
Uganda es un país del continente africano, situado en África Occidental, tiene una superficie de 241.038 km², formada por 111 distritos, su capital y ciudad más poblada es Kampala ¡Bienvenidos a la Perla de África!
Kampala es una ciudad y capital del país de Uganda, tiene una superficie de 195 km², a una altitud media de 1189 metros sobre el nivel del mar, situada en la región central. Muestra un ambiente moderno y cosmopolita. Famosa por sus atascos, ¡son infernales! ¡Recuerda!, no es muy aconsejable visitar de noche, ya que no es muy segura y… ¡Más para gente blanca!
Al final del post os dejamos toda la información necesaria para preparar un viaje a Uganda.
Nuestro cuaderno de bitácoras:
Llegamos al Aeropuerto Internacional Adolfo Suárez Madrid Barajas, accedimos a la terminal 1, nos dirigimos a los mostradores de la compañía aérea Turkish Airlines para facturar las mochilas al aeropuerto Internacional de Entebbe (Uganda). Desde Madrid no hay vuelos directos, tuvimos que viajar de Madrid a Estambul y de Estambul a Entebbe. Pasamos el control de seguridad, esperamos a que pusieran en los monitores del aeropuerto la puerta de embarque, llegó la hora y subimos al avión, tuvimos un viaje de 4 h y 15 minutos. Las azafatas sirvieron comida y refrescos. Pasado ese tiempo, aterrizamos en el aeropuerto Internacional de Estambul. Aquí teníamos una escala de 1 h y 25 minutos, donde tuvimos que pasar un nuevo control de seguridad y escáner, aunque estábamos como pasajeros de tránsito. El vuelo de conexión se retrasó, más de 1 h pasado ese tiempo volvíamos a subir en otro avión de la misma compañía aérea con destino a Entebbe, este vuelo tampoco fue directo, hicimos una escala técnica de 1 h en el aeropuerto Internacional de Kigali (Ruanda) no tuvimos que bajar de él. El viaje tuvo una duración total contando la escala de 8:00 h y 10 minutos. Durante el vuelo, la tripulación del avión ofreció comida y bebidas.
¡Al fin aterrizamos en el Aeropuerto Internacional de Entebbe! Ahora tocaba pasar el control de inmigración, como salimos de unos de los primeros, no tuvimos que hacer demasiada cola. Llegamos a la ventanilla de inmigración, mostramos la visa, pasaporte, cartilla de vacunación internacional y tarjeta de embarque. En unos pocos minutos teníamos puesto en el pasaporte la pegatina del visado. Acudimos a la cinta de equipaje para coger las mochilas, una vez con el equipaje tocaba abandonar el aeropuerto, a la salida (nos tenía que esperar un empleado de la empresa Destination Jungle) pero al final, vino un trabajador del hospedaje Cassia Lodge, donde nos hospedaríamos esa noche. Hicimos un viaje de 47 minutos, unos 42 km. Eran las 4:00 h de la madrugada, accedimos al tramo de la autopista que ha construido una empresa china, cuando nosotros visitamos la zona aún era gratuita, estaba en meses de prueba. Tuvimos que esquivar, para no tener un accidente, a un coche que circulaba en dirección prohibida, ¡un kamikaze!, por la autopista. Las calles llenas de gente, música fuerte, kamikazes por las carreteras, esto prometía, iba a ser un viaje bastante salvaje… ¿Quién nos lo iba a decir?…¡Unas vacaciones que por poco acaban en un infierno!
Llegamos al hospedaje Cassia Lodge alojamiento de tres estrellas, ofrecen wifi y parking gratis. Hicimos el check-in, nos asignaron la habitación n.º 17. El check-in a partir de las 12:00 h el check-out hasta las 11:00 h. Admiten mascotas bajo petición. Es un hospedaje sencillo, para pasar en él pocos días. Se encuentra a 2,5 km del centro de la ciudad. La dirección es Plot 15 Buziga Rd Kampala.
Nos fuimos directamente a la cama ¡Buenas noches andorreros! En unas pocas horas sonó el despertador, a las 7:20 h de la mañana. Una vez listos bajamos al comedor del hotel donde sirven el desayuno, es tipo buffet, pero no hay mucha variedad, es bastante flojo. Estábamos tan dormidos que no le hicimos la foto al desayuno, ¡Qué desastre! Eso sí, hicimos alguna foto desde su terraza, desde allí, obtuvimos unas vistas del Lago Victoria. Aunque el día estaba muy gris, amenazaba con lluvia, ya la noche anterior, había llovido mucho. ¿Sabías qué es el segundo lago de agua dulce de la Tierra? Está situado en la zona centro oriental de África, transcurre por los siguientes países: Kenia, Tanzania y Uganda. Tiene una longitud de 337 km, una anchura máxima de 240 km, una superficie de 69482 km², una profundidad media de 40 metros y una máxima de 83 metros, estando a una altitud de 1134 metros.
A las 8:00 h de la mañana nos esperaba en la recepción un chofer guía, Peter y una representante de la empresa Destination Jungle. La página web: http://www.safaritoeastafrica.com El teléfono: +256414232. Compramos un viaje de 7 días en Uganda (Primates de Uganda) pagamos 2.840 € por persona, en el precio nos incluía: guía conductor (habla inglesa) transporte en 4×4, agua abordo, entradas a los parques, impuestos, excursión en barco por el río Kazinga, senderismo de chimpancés en el Parque Nacional de Kibale, permiso de gorilas y alojamiento en pensión completa.
Subimos en el Toyota Land Cruiser este viaje lo compartíamos con otros viajeros: Silvia (chica, catalana, España) y Giorgio (hombre, romano, Italia). El 4×4 tenía una capacidad para siete pasajeros, más el conductor. Tan solo íbamos cuatro viajeros y el guía conductor. Es cierto que el vehículo, no era muy nuevo, algunos cinturones no funcionaban, no todas las puertas cerraban bien, el techo cuando se cerraba no era totalmente hermético, etc.
Una vez todos en el vehículo, emprendimos el viaje, Silvia, pidió hacer una parada, en un banco en la ciudad, en Kampala, aquí aprovechamos todos y cambiamos dinero. Ahora, tocaba poner dirección hasta Rhino Fund Uganda, antes nos detuvimos en la carretera, donde Peter (nuestro guía) compró unas piñas. No os podéis imaginar como los lugareños se tiraron hacia el 4×4, nos vendían piñas, sandías, plátanos, pinchos de pollo, etc.
Nosotros compramos varias ramas de plátanos pequeños, pensábamos comprar solamente una, pero al final, la vendedora nos vendió toda la mercancía que llevaba. Pagamos un total de 4113,38 UGX (1 € aproximadamente).
Por la carretera, vimos varios camiones que transportaban vacas, Ankole Watusi, nombre científico Bostaurus, es una raza bovina, llamativa por su gran cornamenta, teniendo largos y gruesos cuernos. ¡Pobres animales! ¿dónde acabarían?
Retomamos la carretera hasta llegar a Ziwa Rhino Sanctuary (Santuario de Rinoceronte Ziwa) este, se creó como una organización no gubernamental en el año 1997 para repoblar Uganda de rinocerontes salvajes. El rinoceronte blanco y negro, se encuentra actualmente en peligro de extinción globalmente. En el año 1983 estos dos tipos de rinocerontes se extinguieron en su totalidad en Uganda, debido a la caza furtiva, la venta de sus cuernos en el mercado negro, conflicto armado, la destrucción del hábitat natural, etc.
El Santuario de Rinoceronte Ziwa (Ziwa Rhino Sanctuary) tiene una superficie de 7.000 hectáreas de sabanas y bosques, viven en semi libertad, el lugar está vigilado por guardabosques armados, han comenzado un programa de reproducción y liberación de dichos animales. Al principio había un total de seis animales, cuatro de estos fueron comprados de Solio Ranch, en Kenya, y dos donados por Disney’s Animal Kingdom, en Orlando (Florida, EEUU). Desde el 2010, es el único sitio de Uganda donde se pueden ver rinocerontes en su hábitat natural. En marzo del 2018 ya había un total de 22 rinocerontes. La visita se desarrolla a pie, el tiempo de la vista es de 1 a 2 h dependiendo de la ubicación de los rinocerontes. Hay que llevar un calzado cerrado que no resbale, repelente para mosquitos, agua, crema solar, gafas de sol, sombrero o gorra, ropa de color camuflaje (nada de colores llamativos) no es aconsejable llevar mochilas, ni bolsos, porque puedes quedar atrapados entre los arbustos. En la puerta principal hay que registrarse en el formulario de ingreso.
Se cobra 45 dólares americanos por persona (40,41 € aproximadamente). El pago se realiza al guardabosque que acompaña en la visita. Al terminar la visita se pide dejar una propina al guardabosque que haya estado contigo durante la visita. Con el precio de ingreso es destinado al cuidado y mantenimiento de los rinocerontes. Abierto todos los días del año, desde las 7:30 h no se permite la entrada después de las 21:00 h En días de lluvia puede permanece cerrado. En la visita está prohibido hablar fuerte, alimentar a los animales, tocar, etc.
Bajamos del 4×4, nos acercamos hasta la oficina donde nos registramos (hora de entrada y salida, pasaporte, nombre, nacionalidad, edad, etc.) esperamos unos minutos a que nos asignaran al grupo un guardabosque. Comenzamos una caminata a pie por el parque. ¡Avisaron a nuestro guía!, del punto de localización de un rinoceronte negro con su cría. Llegamos a la zona y allí estaban. ¡Ojo!, no hay ninguna barrera de seguridad, entre el animal y el visitante. Tomamos fotografías y contemplamos el lugar, cuando el animal notó presencia de personas, vino hacia nosotros, en ese momento tuvimos que ir a buscar escondite, (camuflarte entre los arbustos pequeños y no hacer ruido) para que el animal se desoriente y no te encuentre. ¡Ojo! Estos animales son muy peligrosos.
Nosotros vimos el rinoceronte negro (diceros bicornis) es un mamífero de la familia de los rinocerótidos, habita en la sabana africana, su color es negro, tiene 1,6 metros de altura y pesa 1.500 kilos, es el cuarto mamífero más grande de África, detrás del elefante. Se alimenta de hojas de arbustos y árboles bajos, es un animal herbívoro. Las hembras tienen un periodo de gestación de 15 a 16 meses, dando a luz a una sola cría. Tienen un promedio de vida entre 30 a 40 años.
El rinoceronte blanco no tuvimos la posibilidad de verlo (ceratotherium simum) es un mamífero de la familia rhinocerotidae, siendo el mayor de las cinco especies de rinocerontes que existen hoy en día, y es el segundo mamífero terrestre más grande después del elefante. Pesan hasta 4 toneladas, pueden llegar a tener 4,2 metros de longitud, 1,85 metros de altura, tiene dos cuernos, su piel es de color gris, su olfato y oído muy desarrollado, en cambio, su vista no es muy buena. Habita las sabanas africanas, su promedio de vida es de 40 a 50 años. Los machos viejos suelen ser solitarios.
Nos localizaron a otro rinoceronte negro, este, estaba solo, estuvimos unos minutos observándolo, hasta que vino hasta nosotros, rompiendo ramas de arbustos, a gran velocidad, tuvieron que arrancar una moto, unos de los guardabosques, y así lo espantaron, si no, ¡acabaríamos siendo comida para el rinoceronte! En el lugar estuvimos como 1 h y 15 minutos. Es cierto que este viaje ha sido mucho más salvaje que los otros safaris que hemos realizado por África.
En el santuario también vimos alguna que otra vaca, la Ankole Watusi. ¡Recuerdas!, párrafos anteriores hemos hablado de este bovino.
Era el momento de almorzar, la comida nos la sirvieron en el propio parque (a la llegada puedes escoger entre una lista de carnes, el plato que quieres que te elaboren, mientras tú realizas la actividad) nosotros escogimos para uno un filete de vaca acompañado de verduras y para el otro un muslo de pollo. De bebida una botella de agua mineral sin gas y un refresco. Solo tuvimos que pagar las bebidas, la entrada al santuario y la comida la teníamos incluida. Pagamos un total de 12300 UGX (3 € aproximadamente). La comida fue muy básica y para nuestro gusto personal las carnes estaban muy duras, ¡pero era lo que había!, nos lo comimos todo.
Terminado el almuerzo, continuamos con el viaje en 4×4, desde la ventanilla del vehículo, vimos la Cascada de Karuma, en el río Nilo. Las fotografías no son muy buenas, fueron tomadas desde el coche en movimiento, Peter, iba a toda velocidad, quería llegar al alojamiento antes de que se hiciera demasiado de noche.
Unos kilómetros más adelante había poblados, donde se podían apreciar, las construcciones de viviendas con forma cilíndrica y techo de paja, mujeres y hombres trabajando manualmente, en la separación del grano de trigo, etc.
Seguimos con el viaje hasta llegar al hospedaje Pakuba Lodge donde pasaríamos dos noches. Alojamiento sencillo, dispone de wifi gratis en las zonas comunes (aunque no va muy bien) parking gratis, se admiten mascotas de forma gratuita, bajo petición, el desayuno es continental, tipo buffet. El check-in de 7:00 h a 22:00 h, el check-out de 8:00 h a 11:00 h. Se encuentra en Pakwach East, la dirección es Gulu-Arua Rd. Uganda.
Hicimos el check-in, nos asignaron la habitación n.º 43, fuimos hasta ella, dejamos las mochilas y acudimos al comedor, donde sirven la cena tipo buffet. Comimos un poco de carne de vaca con guarnición de arroz blanco hervido.
Acabada la cena, hablamos con Peter, para concretar a que hora era la salida del día siguiente. Bueno, andorreros, era el momento de irse a la cama… ¡Estábamos muy cansados!
Al día siguiente, sonó el despertador a las 5:00 h de la mañana, nos arreglamos y acudimos a desayunar al comedor del hospedaje, donde había desayuno tipo buffet (la verdad que era muy sencillo, no había mucho donde elegir). Escogimos un poco de fruta y un café con leche.
El Parque Nacional de las Cataratas Murchison su nombre es debido por las Cataratas Murchison, estas fueron bautizadas en honor al presidente de la Royal Geographical Society. Es un espacio protegido desde 1910, en el año 1952 fue nombrado Parque Nacional, tiene una superficie de 3480 km², es uno de los más visitados de Uganda, así mismo es el más grande. Situado en el norte de Uganda Occidental. La dirección es Lolim, Masindi, Uganda. La entrada a la reserva es de 40 dólares americanos por persona (33,02 € aproximadamente) tiene una validez de 24 h si te pasas del horario ya sean 30 minutos ó 1 h tendrás que abonar otros 40 dólares americanos por persona (33,02 € aprox.) Para obtener una información más precisa de los precios de las entradas a parques en Uganda. La página web: https://ugandatourismcenter.com/wp-
El primer animal que tuvimos la oportunidad de ver fue una manada de leonas, con un león, estaban tumbados, ¡bien a gusto!, lo que nos indicaba que hacía poco que habían estado de cacería.
La leona, una adulta puede pesar hasta unos 130 kg, con una altura de 1,1 metros y una longitud total (cabeza y cuerpo) de 1,4 metros. Viven en manadas de 5 a 25 miembros. No tiene melena, pueden concebir crías dos veces al año, con un periodo de gestación de 100 días. Dan a luz de 2 a 4 cachorros, esta deja la manada, estando apartada varias semanas, antes de volver con los nuevos miembros. Las leonas son siempre la que realizan las cacerías en grupos, siendo dos, el resto del grupo se oculta y sale a atacar en el momento adecuado para hacerse con la presa. Cazan antílopes, cebras, búfalos, ñu, jirafas, etc. También tienen la función de cuidar de los cachorros y enseñarles a cazar.
El león «El rey de la sabana», es un mamífero carnívoro, de la familia félidos, es el segundo felino más grande detrás del tigre. Los adultos en libertad, tiene un promedio de vida de 10 a 14 años. Habita la sabana del centro y sur de África. Pueden pesar hasta los 190 kg, con altura de 1,2 metros, longitud 1,7 metros, contando cabeza y cuerpo. Los leones se caracterizan por tener una melena de pelo rodeándole la cara, extendiéndose por el cuello, cuanto más oscura y densa sea, el animal es más viejo. Su cola acaba en un mechón de pelo. Pueden llegar a dormir en un día hasta 20 h. El macho tiene el papel de defender el territorio de su manada.
Tomamos algunas fotografías y grabaciones, Peter, no quería que permaneciésemos más tiempo en el lugar. Nosotros nos hubiéramos quedado algunos minutos más. Continuamos con el safari, aún no había demasiada luz, pero era el mejor momento de ver a los animales activos, disfrutábamos del paisaje que nos ofrecía el parque.
Vimos la grulla coronada, Balearica regulorum es un ave, símbolo de Uganda, aparece en la bandera del país. Viven en bandadas o en pareja. Habita en la sabana africana al sur del Sahara, en zonas húmedas o pantanosas, orillas de los ríos, etc. Tiene una longitud de 100 a 110 cm, pesa de 4 a 7 kg. El macho suele ser más grande que la hembra. De plumaje negro y gris, alas blancas, patas y cuello largo, son neognatas (tiene cuatro dedos en las patas, tres adelante y uno hacia atrás). Posee un copete amarillo con tonos dorados y manchas negras, en la parte superior de la cabeza. Su alimentación es omnívora, insectos, sapos, ranas, gusanos, semillas, etc. Puesta de uno a tres huevos, periodo de incubación cuatro semanas.
El búfalo cafre, nombre científico Syncerus caffer, de la familia Bovidae, es un mamífero herbívoro, se alimenta de hierba, hojas, pasto, etc. Con una masa corporal en adulto de 590 kg, longitud de 2,5 metros. De pelaje oscuro, siendo escaso, teniendo mayor cantidad sobre las orejas y en la punta de la cola. Sus cuernos pueden llegar a medir 1,5 metros, las hembras también tienen, aunque son algo más pequeños, estas, cuentan un periodo de gestación de 11 meses, dando a una sola cría. Los búfalos cafre, viven unos 25 años. Los machos se convierten en solitarios, en sus últimos años de vida. Estos viven en rebaños de unos 100 individuos, habitando cerca del agua, pantanos, charcas, en sabanas, praderas, etc. Sus depredadores son los leones, el cocodrilo del Nilo y el ser humano.
El elefante su nombre científico es elephantidae, con una masa corporal de hasta 6.000 kg, una altura de 3,3 metros y una longitud de 5,5 a 6,5 metros. Las hembras suelen ser un poco más pequeñas que los machos. Posee una larga trompa con más de 40.000 músculos, la utilizan para beber, coger comida, emitir sonidos y oler. Son herbívoros. Es el mamífero terrestre más grande del mundo. Su promedio de vida es de 60 a 70 años. Tanto los machos como las hembras tienen grandes colmillos, han sido en muchas ocasiones asesinados por cazadores furtivos de marfil. Las hembras, su periodo de gestación es de 22 meses, dando a luz a una sola cría como normal general, son pocos los casos de dos crías. Se caracterizan por tener un oído y el olfato muy desarrollado, en cambio, su vista no es muy buena. De los elefantes de esta manada, algunos estaban envueltos en una capa gruesa de barro, es una forma de proteger su piel de los rayos del sol.
¡Aparecieron las jirafas!, ¡el animal más elegante de África!, La jirafa, nombre científico Giraffa camelopardalis, tienen una masa corporal en adulto de 800 kg, una altura de 4,6 a 6,1 metros, una longitud de 4,2 metros. Los machos son un poco más grandes que las hembras. Es el animal terrestre más alto del mundo. Se caracteriza por tener un largo cuello y patas, su pelaje es de color blanco con manchas de tonos crema, marrón y rojizo. Cuenta con dos cuernos estando recubiertos de piel. Viven en grupos de 20 a 30 miembros y cuando envejecen busca la soledad. Se alimentan de hojas, brotes de plantas, semillas, etc. Las hembras tienen periodo de gestación de 15 meses, dan a luz a una sola cría, aisladas de la manada.
El antílope acuático, nombre científico Kobus ellipsiprymnus, mamífero de la familia Bovidae, herbívoro. El macho, con una longitud de 1,4 a 2,4 metros de masa corporal de 200 kg a 300 kg, es el único que tiene cuernos anillados teniendo hasta 1 metro de longitud, la hembra pesa entre 160 kg a 200 kg y carece de cuernos. De pelaje marrón rojizo, pezuñas largas y abiertas, estas, le permiten realizar desplazamientos en los fondos de los ríos, charcas, etc. Son buenos nadadores. Con un periodo de gestación de 270 días, teniendo a una sola cría. Habita en la zona de la sabana, cerca de lagos y ríos. Su promedio de vida es de unos 18 años. Los mayores depredadores que tienen son: león, leopardo, hienas, etc.
Hicimos una parada técnica, para hacer uso del baño, más bien, fue al aire libre, aprovechamos y tomamos unas fotografías del lugar.
El cálao terrestre norteño es un ave, su nombre científico es Bucorvus abyssinicus. Es un animal terrestre, pocas veces se ven en los árboles, no son migratorios. Con una masa corporal de 4 kg, una longitud de 100 cm y altura hasta de 1 metro. El plumaje es de color negro, teniendo algunas plumas blancas. Los machos tienen coloración roja continua en la cara y cuello, en cambio, las hembras tienen manchas azules en el cuello. El pico es negro, recto y grande. Se alimenta de anfibios, reptiles, insectos y son capaces de comer carroña si la comida les escasea. Habita en la sabana y praderas, viven en grupos de 2 a 8 individuos.
El alcefalo de jackson son antílopes, pesan entre 120 a 200 kg, largo entre 1,5 a 2,4 metros y una altura de 1,2 a 1,5 metros. Sus patas delanteras son más largas que las traseras. Cabeza larga y estrecha con grandes glándulas debajo de sus ojos. Tanto el macho como la hembra tienen cuernos anillados, llegando hasta los 70 cm de largo. El pelaje de los machos es marrón oscuro, el de la hembra es mucho más claro. Con un periodo de gestación de 214 a 242 días, dando a luz a una sola cría por parto y año. Se alimentan de pasto.
Vimos a una cigüeña marabú, rodeada de cuervos, estos, estaban comiendo algún animal muerto, que había en la zona. La cigüeña marabú, nombre científico Leptotilos crumeniferus, pesan hasta 7 kg y 1,5 metros de altura. Su cabeza apenas tiene plumaje, la piel tiene unas tonalidades marrones y rojizos. Animal carnívoro, también caza pequeños insectos. Habita en el África tropical, en la sabana subsahariana, zonas pantanosas, etc. Viven unos 15 años.
Llegamos a la ribera norte del Lago Alberto este lago está en el África Central, ubicado en el Gran Valle del Riff. Tiene una longitud de 160 km, una anchura máxima de 35 km, superficie de 5350 km², un volumen de 132 km3, con una profundidad media de 25 metros y una máxima de 58 metros, a una altitud de 615 metros. Aquí bajamos del vehículo, Peter, cortó las piñas, que compró el día anterior, nos la comimos obteniendo estas vistas panorámicas del lugar y disfrutando de los animales que había en el entorno.
Observamos hipopótamos nombre científico Hippopotamus amphibius, mamífero herbívoro, de la familia hippopotamidae. El macho, con una masa corporal de 1500 kg a 1800 kg, la hembra de 1300 kg a 1500 kg. Tienen un promedio de vida de 40 a 50 años. Llamativos por tener una boca grande y dientes, su piel es muy lisa y débil y sin apenas pelos, patas cortas, cuerpo robusto, pequeños ojos y orejas. Habita en el África subsahariana, en grupos de 5 a 30 miembros. Como norma general, durante el día se lo pasa en el agua de ríos, charcos o zonas fangosas. Son capaces de copular y llevar a cabo el parto en el agua. Al anochecer suelen salir en busca de pasto. En la tierra, corriendo pueden llegar alcanzar hasta los 30 km/h. Está considerado como uno de los animales más agresivos del mundo. Se encuentran amenazados por la caza furtiva, su piel y el marfil de sus dientes.
El antílope impala su nombre científico Aepyceros melampus, familia Bovidae, los machos con una masa corporal de 40 a 75 kg, las hembras de 30 kg a 50 kg. Pelaje de color marrón claro y de color blanco en el pecho, vientre y cuello. En los cuartos traseros se les ve una línea vertical de color negro. Ojos grandes, orejas afiladas y delgadas. Los machos son los que poseen cuernos, llegando a medir hasta los 90 cm de largo. Estos realizan saltos que pueden llegar alcanzar más de 10 metros de longitud. Se alimenta de hojas, hierbas y semillas. Habita en sabana y en bosques poco densos en manadas de 10 a 100 miembros. Sus depredadores son el guepardo, leopardo, león, hiena, cocodrilo, etc.
El jabalí verrugoso, nombre científico Phacochoerus, con cabeza grande, en la cara tiene verrugas, de eso le viene el nombre, hocico largo, con un colmillo a cada lado, cuerpo grande y patas cortas, cola larga, pesa entre 50 a 100 kg, altura unos 70 cm. Habita en África, al sur del Sáhara. Se alimenta de pasto, tubérculos, raíces, etc. Las hembras tienen una gestación de unos 175 días, teniendo unas cuatro crías por parto. Sus mayores depredadores son: leones, leopardos y guepardos.
A las 11:00 h de la mañana ya estábamos de vuelta en el hotel, a las 12:00 h nos sirvieron el almuerzo, fue tipo buffet.
A las 12:30 h tocaba visitar las Cataratas Murchison, bueno antes subimos en una lancha motora de la empresa Wild Frontiers Nile River Safaris, para realizar un paseo de 1 h aproximadamente por las orillas del Nilo. La página web: https://www.wildfrontiers.com/nile-river-excursions/ El teléfono de contacto: +27(0)117022035. Acompañados de un guía y el conductor de la lancha.
Aquí vimos una gran cantidad de animales y aves, como: hipopótamos, cocodrilos, elefantes, martín pescador, pelicano común, águila azor africana, etc.
El Martín Pescador llamado científicamente Alcedo atthis, es un ave de pequeño tamaño, con una longitud de 16 a 17 cm. Pico largo de color negro, patas y cola corta. Se alimenta de pequeños peces, insectos acuáticos, anfibios, larvas, etc.
El cocodrilo del Nilo, crocodylidae, es un reptil semi acuático, del cual hay catorce especies. Habita en las regiones tropicales de África, Asia, América y Australia. El tamaño varía según el tipo, pueden llegar a los 6 metros y pesar hasta los 730 kg. Con piel escamosa, seca y dura, en la parte superior de su cabeza se encuentran sus fosas nasales y sus ojos, esto le hace poder ver y respirar mientras está en el agua. Son depredadores, se alimentan de animales vertebrados. Viven de 50 a 80 años.
Bajamos de la lancha al otro lado de las orillas del Nilo, donde hay un tramo de escaleras, aquí comenzamos una caminata a pie para llegar hasta las Cataratas Murchison. En este punto hay que pagar 15 dólares estadounidenses por persona (13,45 € aproximadamente). Nosotros ya lo teníamos incluido en la actividad. Para personas con movilidad reducida puede resultar bastante complicado, hay subidas, bajadas, tramos de escalones, desniveles, etc. Se debe llevar agua, crema solar, gorra o sombrero, y repelente para mosquitos y un calzado cerrado que no resbale.
Las Cataratas Murchison también se las conoce como Cascada Kabalega o Kabarega formada por un conjunto de tres caídas, con 120 metros de altura, una anchura de 7 metros, con un caudal de 300 m³/s. Esta fue descubierta por Samuel White Baker (explorador, militar, naturalista, ingeniero y escritor, de nacionalidad británico) en 1864, convirtiéndose en el primer europeo que las visitó. El nombre de la caída de agua hace honor al presidente de la Royal Geographical Society, Roderick Murchison. Entre los años 1907 y 1912 la región se vio deshabitada a causa de una epidemia de la enfermedad del sueño, esto hizo que sus habitantes tuvieran que abandonar la zona.
Hoy en día, en el lugar, vive la mosca tse tsé (Glossina) de la cual hay 23 especies y varias subespecies. Las picaduras de este insecto, provocan la enfermedad del sueño, es una infección parasitaria que afecta tanto a personas como animales, lo que provoca trastornos sensoriales, neurológicos, motores y psíquicos, si no se trata puede conducir a la muerte.
Llegamos hasta el punto de estacionamiento de vehículos, aquí nos esperaba Peter, subimos en el 4×4, hasta llegar al punto donde hay que bajar del vehículo, y subir a una plataforma, para cruzar el río Nilo, hasta la otra orilla. Esta va escoltada por el ejército de Uganda, es una forma de seguridad, para que los cazadores furtivos no tengan la posibilidad de sacar animales del parque. ¡Ojo!, hay unos horarios determinados para el cruce, abajo os dejamos una fotografía. Cuando nosotros visitamos la zona estaban construyendo un puente para vehículos, en unos años estará acabado. Mientras esperábamos a la plataforma, tomamos una fotografías de una bola del mundo, que hay en el lugar, donde marca el punto de las Cataratas Murchison.
Peter, nuestro guía conductor en este viaje, a mí personalmente, Elisabeth, no me gustó ni un pelo, desde el primer momento en que lo vi. Me parecía una persona fría, calculadora, parecía que realizaba su trabajo sin ganas, como si fuera una obligación. En los safaris, a penas nos dejaba disfrutar de los mamíferos, siempre teníamos que estar pidiendo que se detuviera, él siempre se paraba a ver aves. ¡Era un auténtico pajarero! Conducía a mucha velocidad. Giorgio (compañero de safari), continuamente, le llamaba la atención y Peter, respondía: «Game Drive» juego de conductor.
Llegamos al campamento, nos dimos una ducha y descansamos un poco a las 19:00 h sirvieron la cena, tipo buffet. Bueno, andorreros esto fue todo por ese día.
Sonó el despertador, desayunamos e hicimos el check-out, a las 6:15 h subimos en el 4×4, emprendimos el viaje de regreso, volvíamos a tener que hacer de nuevo el cruce en la plataforma para cruzar el río Nilo. Tomamos la carretera hasta llegar al Parque Nacional de Kibale.
Por el camino nos detuvimos unos minutos para contemplar a los monos Colobus guereza especie de primate catarrino de la familia cercopithecidae. El macho es más grande que la hembra, con una masa corporal de 13 a 14,5 kg y una longitud de 45 a 72 cm, y si contamos la cola, entre 52 cm a 82 cm. De pelaje negro, su cara, pecho, hombros y la cola es blanca. La hembra tiene un periodo de gestación de 169 días. Habita en bosques secos y húmedos de África oriental y central. Suele permanecer en los árboles, es un animal diurno. Viven en grupos territoriales de 8 a 15 individuos. Son herbívoros, se alimentan de hojas, frutos, brotes, etc. Pueden vivir más de 20 años.
El Parque Nacional de Kibale se fundó en 1932, pero no se convirtió oficial hasta el año 1993, tiene una superficie de 776 km², estando a 1.100 y 1.600 metros de altitud sobre el nivel del mar. Es conocido por la población de chimpancés que habitan en él, además se pueden ver 12 especies de primates, 372 especies de aves registradas en el parque, 250 de mariposas, etc. Allí se ubica la estación biológica de la Universidad de Makerere. Se encuentra en el suroeste de Uganda. Aquí os dejamos la web: https://www.kibalenationalparks.com
El día estaba bastante gris y amenazaba con lluvia, tuvimos que colocarnos el impermeable, ¡ahora sí!, empezaban a caer las primeras gotas de lluvia. ¡El día prometía! No íbamos a ver a ningunos chimpancés…
Comenzamos a las 8:00 h de la mañana, en la oficina principal del parque. Entramos en una sala donde nos dieron una charla sobre el parque y como tenemos que comportarnos durante la visita a los chimpancés. Acabada la explicación, dividieron a los visitantes en grupos de ocho personas. Como éramos pocos en ese día, nuestro grupo solo lo formábamos cuatro personas (nuestro 4×4). El guía se iba comunicando con otros mediante emisora, es una forma de poder localizar más pronto a estos primates.
Para realizar la visita hay que llevar agua, repelente para mosquitos, crema solar, gorra o sombrero, calzado cerrado que no resbale y de caña alta (para evitar las sanguijuelas), vestir de manga larga y chaqueta impermeable para días de lluvia. Está prohibido hacer fotografías con flash, el mirar a los ojos de los chimpancés, darles de comer, tocarlos, arrojar basura al parque, etc. ¡Recuerda!, es muy importante no ingresar enfermo al parque, ya que podrías infectarlos. Si se acerca uno de estos a ti, durante la visita debes mantenerte quieto. El coste del permiso es de 150 dólares estadounidenses por persona (134,44 € aprox.) en este precio se incluye acceso, guía y trekking de rastreo. Nosotros lo teníamos incluido en el safari. Es posible pagar en efectivo o con tarjeta de crédito. El recorrido es de casi 2 h aproximadamente.
Iniciamos la caminata y la lluvia nos acompañaba, no veíamos ningún chimpancé, caminábamos por los senderos, tomamos algunas fotografías, pero nada, los primates no se dejaban ver. Había que tener cuidado de las sanguijuelas y de no quedarse pegado en las telarañas que había por los senderos.
¡Al fin!, se dejó ver un chimpancé y más tarde llegaron más miembros, estos están en lo alto de las ramas de los árboles, es necesario llevar una cámara fotografía que tenga un buen zoom de alejamiento.
Los chimpancés pesan de 40 a 60 kg, miden hasta 1,6 metros, las hembras son algo más pequeñas. Están cubiertos por un grueso pelaje de color negro, excepto en las palmas de las manos, dedos y planta de los pies. Cabeza redonda, orejas grandes, y los brazos son más largos que las piernas. Es omnívoro, consume frutas, hojas, flores, semillas, cortezas e insectos. Viven en grupos de 5 a 150 miembros. Son diurnos, estos pasan la mayor parte de su vida sobre los árboles. Las hembras tienen una gestación de 8 meses, solo nace una cría. Se encuentran amenazados por la destrucción de su hábitat, caza furtiva y enfermedades infecciosas que cogen.
¡La lluvia paró!, y no nos dimos ni cuenta… Tuvimos la oportunidad de ver a dos chimpancés copulando, ¡fue visto y no visto!
Terminamos con la visita, nos despedimos de la guía y le dimos una pequeña propina. Almorzamos en el propio parque, en una zona destinada para ello, con mesas y sillas. Aquí tomamos el picnic, que nos habían preparado en el hotel, para uno fue un sandwich de tomate y queso, para el otro un muslo de pollo, huevo cocido, papas fritas, manzana, de bebida agua y zumo de naranja.
Abandonábamos el Parque Nacional de Kibale para poner dirección a Bugoma Jungle Lodge, el que sería nuestro alojamiento por una noche.
Por el camino, nos tuvimos que detener, en una gasolinera taller, el 4×4 nos estaba dando problemas, llevamos encendida una luz en el salpicadero. Después de estar más de 40 minutos en la zona, parece que ya se había solucionado el problema, aunque la luz en el salpicadero continuaba encendida.
Llegamos a Bugoma Jungle Lodge es un eco lodges, abrió al público en el año 2011, cuenta con varios bungalows, cuando nosotros visitamos la zona estaban ampliando el hospedaje. ¡Se ve que la cosa va bien! Wifi gratis en la recepción y comedor. La dirección es Kyangwali Road-Nyakafunjo Village, 5 km off Kabwoya (Hoima District). Hicimos el check-in y nos asignaron el bungalow, Nahans Francolini.
Dejamos las mochilas y acudimos hasta la recepción, (escogimos el plato que nos iban a cocinar entre los que nos daban la opción). Aquí nos esperaba un chico de la organización Boomu Women Group. Caminando llegamos hasta una aldea local, cercana a nuestro hospedaje, donde tuvimos la oportunidad de conocer de cerca la vida que desarrollan las familias rurales de Uganda. Los productos que cosechan en sus tierras (maíz, papas, tomates, etc.), el tipo de viviendas en las que habitan, etc. La actividad tiene un coste de 25 dólares estadounidenses por persona (22,42 € aprox.) Nosotros la teníamos incluida en el precio del safari.
Tras estar con ellos un par de horas, era el momento de abandonar el poblado para regresar al Lodge, los niños, no querían que nos fuéramos, nos siguieron por el camino.
A las 19:30 h tocaba cenar, como aperitivo nos pusieron una tostada de tomate con queso, de planto principal fue una lasaña de vegetales y de postre un plato de fruta.
De nuevo tocaba madrugón, para ese día a las 6:00 h de la mañana ya habíamos desayunado. Realizamos una caminata guiada de unos 30 minutos, por el bosque privado del Lodge, esta actividad era gratuita. ¡La verdad!, es que no vimos a ningún animal. ¡Fue un poco decepcionante!, la noche anterior había llovido mucho. Dicen que en días soleados es posible ver muchas especies de pájaros, primates como: colobo blanco y negro, mangabeys y mono de cola roja.
Regresamos a Bugoma Jungle Lodge, Peter (guía conductor) no aparecía, preguntamos por él y nos dijeron que estaba dándose una ducha. Esperamos al que el hombre terminará, ¡se ve que no tuvo tiempo mientras el grupo estábamos haciendo el sendero!, en fin, sin comentarios…
Iniciamos el viaje en todoterreno, había que llegar al Parque Nacional de la Reina Elizabeth allí nos hospedaríamos en Enganzi Lodge. Por el camino cruzamos plantaciones de té, caña de azúcar, plátanos, etc. Nos detuvimos unos minutos en algunos puntos para poder tomar estas fotografías, incluso Sergio, compró una pequeña rama de plátanos. Pagó 2063 UGX (0,51 € aprox.)
Peter, nos dijo que cambiásemos el lugar del almuerzo, que no le parecía bien, que prefería llevarnos a una zona más rural, aunque había que hacer más kilómetros y perderíamos el safari en ruta, que teníamos esa tarde hasta llegar al hospedaje. Silvia, estaba encantada, quería el cambio, a nosotros no nos parecía bien, ni a Giorgio, y… ¡Cómo éramos mayoría!, continuamos con el programa.
El almuerzo lo tuvimos en The Garden Restaurant aquí pudimos escoger entre buffet, hamburguesa o pizza. Nosotros escogimos pizza, estábamos ya hartos de comer carne y arroz blanco. De bebida pedimos dos botellas de agua mineral sin gas. Las bebidas no la teníamos incluidas. Pagamos un total de 6000 UGX (1,46 € aprox.)
Accedimos al Parque Nacional Queen Elizabeth creado como parque en 1954, es un espacio protegido. Está considerado como uno de los parques nacionales más importantes de Uganda. Tiene una superficie de 1.978 km², es el segundo parque natural más grande de Uganda, detrás de Murchison Fall. Se encuentra dividido por varios factores. Aquí es donde se encuentran los famosos leones que escalan árboles (tree climbing lions), además de elefantes, búfalos, hipopótamos, guepardos, leones, hienas, cocodrilos, babuinos, topi, etc. Se encuentra al sur de las montañas Rwenzori, y linda al norte con el Parque Nacional Kibale.
A la entrada del parque se paga la tasa de ingreso, es de 40 dólares americanos por persona (35,88 € aproximadamente) y 50 dólares americanos por vehículo (44,84 € aprox.) el servicio de contratar un guía es de 30 dólares americanos (26,91 € aproximadamente). Tiene un periodo de validez de 1 día, 24 h. La visita se desarrolla en 4×4 en tour llamado «game drives» (juego de conducción). Es posible visitarlo por libre, alquilando un vehículo, pero nosotros creemos que es más aconsejable hacerlo con guía, ya que estos están comunicados a través del móvil (aquí aún no han llegado las emisoras), resultará más fácil poder ver más animales.
Fue un poco decepcionante el trayecto hasta llegar al hospedaje, solo vimos algún antílope acuático, y antílopes Impala.
Llegamos a Enganzi Lodge es un alojamiento de cuatro estrellas, ofrece aparcamiento gratis, y wifi, en las zonas comunes (aunque no va demasiado bien). Las habitaciones son cabañas, a nosotros nos asignaron la habitación n.º 8. Desde el hospedaje se obtienen vistas panorámicas del Parque Nacional de la Reina Elizabeth. Aquí pasamos una noche. Fue llegar y tener la cena puesta en la mesa, como entrante una ensalada, de plato principal un pisto de verduras y de postre un plato de fruta.
Nos levantamos, recogimos todo, y desayunamos, a las 6:30 h de la mañana salimos para hacer un safari fotográfico en el Parque Nacional de la Reina Elizabeth. De camino paramos en una gasolinera para repostar, estaba fuera de servicio, y como no, Peter, no se acordó de detenerse antes, si no justo en la última que hay antes de llegar al parque, pues nos fuimos hacer el safari con el 4×4 en reserva. ¡Esto prometía…! Nosotros antes habíamos hecho safaris por Kenia, Tanzania, Namibia, Sudáfrica, Zimbabwe, Botswana, y ahora en Uganda. Pero este se llevaba el premio al peor organizado, calidad de hoteles, comida, guía-conductor, etc.
El primer animal que se dejó ver fue el búfalo cafre, unos pocos metros más adelante unos antílopes Impala.
Continuamos con el safari, avisaron por teléfono a Peter, de que había una pareja de leones cerca de donde nosotros estábamos, fuimos en busca de ellos. Llegamos y allí estaban, le pedimos a Peter, que se acercara más al león y leona y nos dijo: que no, pero mira ese 4×4, está más cerca que nosotros. Él nos respondió: ellos han pagado 100 dólares estadounidenses por persona (89,82 € aproximadamente) y vosotros solo habéis pagado 40 dólares estadounidenses por persona (35,93 € aprox.) Yo, Elisabeth, le respondí: Bueno Peter, yo no sé cómo trabajáis vosotros aquí, lo único que sé, es que cuando yo compre este viaje a tu empresa, a mí nadie me dijo que si pagaba más, podría ver a los animales más cerca. Si compráis un safari con la empresa Classic África Safaris, tendréis la oportunidad de ver a los animales más cerca.
La leona no se dejó fotografiar, porque estaba justo debajo del arbusto. Dejamos a un lado a los leones, para seguir viendo otros animales, llegamos a una zona fangosa donde había unos cuantos de hipopótamos tumbados, estaban totalmente camuflados entre el fango.
Luego fuimos hasta un cráter extinguido, que se ha convertido en un lago, alrededor de él, han montado un gran número de puestos con venta de artesanía, vamos. ¡Un auténtico mercadillo! En la zona hay baños (son de pago).
Por último, fuimos hasta donde había un cactus, de grandes dimensiones, ¡sorpresa!, entre sus ramas había un leopardo, Panthera Pardus es un animal mamífero carnívoro perteneciente a la familia de los félidos, los machos tienen una masa corporal de 31 kg y altura en la cruz de 45 a 78 cm, las hembras suelen ser algo más pequeñas. De pelaje amarillo con manchas oscuras, cabeza redonda, cola larga y fina. Corriendo, llegan alcanzar una velocidad de 58 km/h. Se alimenta de las cazas que realizan: antílopes, ciervos, cebras, jabalíes, ñu, etc. Estos habitan en las sabanas, bosques y selvas. Son animales solitarios, excepto en la época de reproducción. Las hembras tienen un periodo de gestación de 90 a 105 días, nacen de uno a seis cachorros por camada. Estos animales tienen un promedio de vida de 12 a 17 años.
Abandonábamos el parque para regresar al Lodge Enganzi Lodge, antes paramos en la gasolinera para repostar gasolina. Llegamos al hospedaje, allí, tuvimos tiempo libre para darnos una ducha y almorzar, acabada la comida, recogimos las mochilas, hicimos el check-out, y subimos de nuevo al 4×4 para esa tarde teníamos un paseo en barco por el Canal de Kazinga (Kazinga Channel).
Peter se puso adelantar a una moto, que por poco, nos la llevamos por delante. Íbamos por una carretera de ripio, a gran velocidad, estaba en obras, iba a ser alquitranada. No había pasado ni un minuto del susto, cuando vuelve a adelantar a un coche en una carretera sin apenas visibilidad, había una nube grande de polvo en la atmósfera, y ocurrió lo que tenía que ocurrir, ¡tuvimos un accidente! Un choque frontal contra el coche que iba bien en su carril. Del fuerte impacto que tuvimos, Sergio, reventó el cristal con su hombro derecho, ocasionándole una herida, donde se le dejaba ver los tendones, se golpeó la cabeza, ocasionándole una gran inflamación en el lateral de la cara, y algunos arañazos en los brazos, Silvia, pequeñas heridas en los brazos, piernas y un gran derrame en la zona de la cadera, Giorgio, se llevó la peor parte, se rompió el hombro, varios golpes en la cabeza con grandes inflamaciones, y muchos cortes en la piel, yo, Elisabeth, me golpee la cara contra el sillón delantero, al llevar puestas las gafas de sol, medio un poco de derrame, justo encima de las cejas. Bajamos como pudimos del coche. El 4×4, había tirado una gran cantidad de aceite.
Peter se bajó y nos preguntó que como estábamos, sacó un pequeño botín y me lo dio a mí, Elisabeth, él se puso a quitarle las pegatinas a las puertas del 4×4, donde ponía el nombre de la empresa, Destination Jungle ¡era más importante eso!, que ayudarnos a curarnos las heridas… y pedir socorro. Peter le comentó a Silvia, que se iba a buscar ayuda, allí nos dejó tirados. Sin darnos cuenta nos vimos envueltos de una gran cantidad de lugareños, que nos decían, «Sorry» (lo siento). El señor del otro coche, que se vio involucrado en el accidente, tuvo que ser sacado entre dos personas, había perdido el conocimiento, lo subieron en un vehículo particular y seguro que se lo llevarían a algún centro médico de la zona, en la parte trasera de la furgoneta iba un niño, unos 9 años de edad, aproximadamente, bajo cojeando. Llegó la policía y pidió explicaciones de lo ocurrido.
A los 20 minutos aparece Peter, con un chico y una furgoneta, nos dice que subamos y cojamos nuestras pertenencias, él se tiene que quedar allí. Nos llevan a un centro médico. Por el camino, nos cruzamos con una camioneta del ejército, que iba a la zona del accidente. Bajamos a las puertas del consultorio Katunguru Health Centre III, pude leer en una placa donde decía «construido con fondos del gobierno de Uganda y el banco africano de desarrollo, inaugurado el 31 de enero del 2013». Giorgio, sentía mucho dolor, a él lo dejan allí, necesitaba un trasladarlo a un centro más grande, tenían que realizarle pruebas.
Subimos en una furgoneta Toyota, poniendo rumbo hasta el Canal de Kazinga acompañados de Ardor (hizo de guía) un conductor, nuestra compañera de viaje Silvia y nosotros. Llegamos al canal situado bajo la península de Mweya. El barco ya había salido, eran las 14:10 h Ardor, habló con el policía que había en la zona y le contó lo sucedido. Hizo que pudiéramos subir en una pequeña barca acompañado con el policía, que nos llevó junto al barco, accedimos a él. La gente que había en el barco nos miraba como bichos raros, y cuchicheaban entre ellos. ¡Si supieran!, las aventuras que estábamos viviendo en Uganda, no se lo creerían.
En el norte del Parque Nacional de la Reina Elizabeth es donde están los lagos, se pueden hacer recorridos en barcas por el Canal de Kazinga.
El Canal de Kazinga en el Parque Nacional de la Reina Elizabeth (Queen Elizabeth Park) tiene 32 km entre el lago Edward y el George, es un espacio natural. Donde pudimos ver animales acuáticos y otros que llegan al lugar para saciar su sed, como: hipopótamos, cocodrilos, pelicanos, elefantes, búfalos, y una gran variedad en aves.
El Jaribú africano pertenece a la familia de las cigüeñas. Habita en humedales, lagos, orillas de ríos, saladares, etc. Se alimenta de peces, insectos, cangrejos, reptiles, crías de aves, y pequeños mamíferos. Viven hasta los 25 años.
Este se puede recorrer en 4×4 o en barca, es más aconsejable en esta última que hemos nombrado. Para llegar al lugar, hay que ir hasta el Parque Nacional de la Reina Elizabeth, pudiendo acceder desde Katunguru o kabatoro. Los barcos salen del canal situado bajo la península de Mweya. Son embarcaciones grandes, de dos plantas, donde se va sentado. Es aconsejable coger el asiento que da a la orilla sur del canal. Los barcos van en dirección al lago Edward, es de poca profundidad, unos 3 metros aproximadamente. El recorrido en barca tiene una duración de 2 h aproximadamente, un coste de 20 dólares estadounidenses por persona (18,07 € aproximadamente). Nosotros lo teníamos incluido en el safari.
Terminamos el paseo en barco, subimos a la furgoneta, con Ardor, fuimos hasta su hospedaje Irungu Forest Safari Lodge & Campsite. Aquí os dejamos su página web: http://www.irunguforestsafarilodge.com, es muy rudimentario, ofrece alojamiento, safaris, actividades, etc. Allí tuvimos la oportunidad de comunicarnos con la encargada de la empresa Destination Jungle, después de lo que había pasado, queríamos seguir con el programa del viaje. Nos dijo: que tenía que hacer un trámite de papeles para poder contratar el servicio con Ardor, para que nos llevaran al siguiente hospedaje, donde nos alojaríamos. Ellos en esa zona no disponían de más vehículos 4×4.
Pasó una hora y no teníamos nada solucionado, cabreados, hablamos con Ardor, y le dijimos que nos hiciera el traslado, nosotros te pagamos y luego ya ajustaríamos cuenta con Destination Jungle. Al principio nos pidió 100 dólares estadounidenses (90,34 € aprox.) no habíamos afirmado, cuando nos dice, no serán 150 dólares estadounidenses (135,51 € aprox.) ¡vamos, esto parecía la bolsa! No íbamos a entrar en ese juego. No había pasado unos minutos, cuando Ardor, nos comunicó que le había llegado el dinero de la otra compañía. Subimos los tres a la furgoneta, tuvimos que pasar por la gasolinera para darle aire a las ruedas, y repostar gasolina, este último en una casa de un poblado, ya que en la gasolinera, él decía que era muy cara. ¡Menuda gasolina le iban a echar a la furgoneta! Nos esperaba un viaje de 110 km, unas 3 horas aproximadamente, ¡una nueva aventura!
Iniciamos el viaje, para sorpresa nuestra, el recorrido se hacía atravesando el Parque Nacional de la Reina Elizabeth. Por el camino, no encontramos manadas de elefantes, búfalos cafre, algún antílope Impala, etc. Silvia, comentó que se detuviera la furgoneta para tomar fotografías, yo, Elisabeth, le exprese, ¡anda, ya hemos tenido bastante por este día!, continuemos con el viaje. Comenzaba a oscurecerse en el parque, allí no había nadie, en tramos no teníamos cobertura móvil. Por delante del coche se nos cruzó un elefante hembra con su cría, se puso algo agresiva, el conductor tuvo que incluso poner la marcha atrás y apagar las luces, parece que el animal se tranquilizase y continuase por su camino. ¿Sobreviviríamos a esta aventura?, ¡quién sabe!, a veces digo yo Elisabeth: «Porque no me quedo en mi casa» Para colmo comenzó a llover intensamente, tormenta acompañada de truenos, el techo de la furgoneta tenía agujeros, y Sergio, se estaba bañando de agua. ¡Qué más no podía pasar! Al conductor, le comenzó a sonar el teléfono, no lo encontraba y se le ocurrió abrir la puerta de la furgoneta. ¡Esto era de locos!, más bien parecía el guion cinematográfico de una película de terror… Sergio, cerró los ojos y me comentó, cuando lleguemos me avisas ¡Qué bien!
Cuando no estábamos acercándonos al hospedaje, Ardor, no sabía la dirección que había que tomar, su instinto le hizo tirar por un camino, ¡tuvimos suerte!, acertó… Ya estábamos en Ishasha Jungle Lodge hospedaje de tres estrellas, ofrece aparcamiento gratuito, y las zonas comunes wifi gratis. La dirección es Kihihi P.O. Box 2874 Kampala, Uganda.
Salió todo el personal para recibirnos, acudimos al comedor para cenar. Como entrante sopa de tomate con cebolla, de plato principal, plátanos fritos y carne de ternera guisada, de postre un plato de fruta.
A Ardor, le comunicaron que se marchara, que mañana a primera hora tendríamos un nuevo conductor-guía y vehículo para continuar con el viaje. ¡Le tocaba deshacer el camino!, que locura…
Hicimos el check-out, nos asignaron el bungalow Turaco. Nos fuimos a la cama, había que descansar, el día fue bastante duro.
A las 7:00 h de la mañana nos levantamos, con un dolor de cabeza y el cuerpo totalmente machacado, Silvia, estaba como nosotros. Desayunamos, una tortilla de huevos, fruta y un café.
Preguntamos a la camarera si había llegado ya el guía conductor de Destination Jungle, y afirmó si ya está aquí, Peter. ¡No por favor! ¿Esto es una broma?…, ¡otra vez con el kamikaze! Los tres nos quedamos con una cara. Allí apareció Peter, perdonar por el accidente, si el conductor del otro vehículo me hubiera esquivado (es que no reaccionó) el accidente se podía haber evitado. El viaje continúa, y hay que olvidar lo sucedido. No respiramos ninguno de los tres, a más de uno se nos pasó por la mente (no se puede ser más cínico). ¿De dónde ha salido este? Preguntamos por Giorgio, continuaba hospitalizado, lo iban a trasladar al hospital de la ciudad, Kampala.
A las 8:00 h de la mañana, subimos en un 4×4 más pequeño, este era de seis plazas, algo más incómodo.
Pusimos rumbo al el Parque Nacional de la Reina Elizabeth, antes de llegar a él, Peter, se dio cuenta de que le faltaban los permisos de entrada al parque, tuvimos que volver al hotel y en la recepción no estaban, llamó a Ardor, los tenía él. Se los mandó por una foto de WhatsApp. No sabíamos si nos iban a dejar entrar en el parque, ¡tocaba cruzar los dedos! Llegamos al control policial, Peter, bajó del vehículo y fue hablar con el policía.
Nos permitieron la entrada, el primer animal que se dejó ver fue el Antílope Tobi, Damaliscus lunatus, perteneciente a la familia Bovidae. Es un mamífero, los adultos tienen un peso de 110 kg y una longitud de 1,7 metros. Su pelaje es corto y con brillo, presenta una coloración parda rojiza, con tonos negros en la parte superior de las patas y blanco amarillento en la parte inferior, cola delgada, que finaliza en un mechón de pelo negro. En su hocico tiene una base negra. Puede correr hasta llegar a alcanzar los 70 km/h. Con la cara muy alargada, orejas estrechas, acabadas en pico, tanto los machos como las hembras tienen cuernos anillados y curvos. Las hembras tienen un periodo de gestación de 238 días. Habita en sabanas y praderas. Es herbívoro, se alimenta de pasto. Sus depredadores son el leopardo, guepardo, león y hiena.
Luego, vimos antílopes Impala, de estos ya teníamos fotografías, ¡los recuerdas!, lo hemos visto en safaris de días anteriores.
Aquí buscábamos los leones trepadores estos, están en el sector sur del parque, en Ishasha. Son leones que suben a los árboles, donde pasan la mayor parte del día durmiendo, dicen que tomaron esta práctica para así evitar las mordeduras de la mosca tse-tsé, otros dicen que suben allí para obtener unas mejores vistas del terreno, o porque el suelo en los meses de verano alcanza unas altas temperaturas, y suben al árbol en busca de frescura ¿quién sabe? Estos leones, los machos, poseen una melena de color negro. Para poder verlos es mejor acceder al lugar en las horas de más calor, estos es cuando trepan a los árboles, a primera hora de la mañana y a última resulta más difícil de verlo, ¡aunque nada es imposible! Llegamos a un árbol y allí había una manda al completo.
Abandonábamos el parque, con una gran satisfacción, habíamos conseguido ver los leones trepadores, es algo que no todo el mundo tiene la oportunidad de verlos. Volvimos al Lodge, para que nos sirvieran el almuerzo, muslo de pollo acompañado de arroz y patatas, de postre, un plato de fruta.
Dejábamos a tras el hospedaje e iniciamos un viaje por carretera en 4×4, hicimos unos 128 km, las vías por las que tuvimos que pasar, eran muy malas, en algunos tramos no había ni camino, a todo esto había que añadirle las lluvias de días anteriores, que las dejaron en un mal estado. Eso sí, disfrutamos de bonitos paisajes, etc. Después de 5 h y 12 minutos, llegamos hasta Inchumbi Lodge.
¡Al fin!… estábamos en Inchumbi Lodge, donde nos hospedaríamos por dos noches. Hospedaje de tres estrellas, dispone de wifi gratis en las zonas comunes. El check-in de 10:00 h a 15:00 h, el check-out hasta las 11:00 h. Aceptan pagos en dólares estadounidenses, euros, moneda local y tarjetas de crédito. Situado cerca del Parque Nacional de la Selva Impenetrable de Bwindi. La dirección es Off Kabale Kisoro Road, Bwindi, Uganda.
Llegamos para que nos sirvieran la cena, como entrante berenjena con queso, de plato principal, filete de tilapia y de postre fruta.
¡Buenas noches andorreros!, había que descansar… Al día siguiente teníamos la visita más importante del país, ir a ver a los gorilas.
El despertador sonó a las 6:30 h corriendo, nos asomamos a la terraza del bungalow, no estaba lloviendo, ¡qué alegría!, pero eso sí, había una intensa niebla.
Desayunamos y sobre las 7:15 h subimos en el 4×4 para ir hasta el Parque Nacional de la Selva Impenetrable de Bwindi se creó en 1991, desde el año 1994 está declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco. Desde 1932 es un espacio protegido como reserva forestal. Tiene una superficie de 321 km², es una selva con montañas, a una altitud entre los 1.160 metros y los 2.607 metros sobre el nivel del mar. Hay 90 especies de mamíferos, en este grupo se incluyen once tipos de primates, el más llamativo es el gorila de montaña, y los más predominantes son: el colobo blanco y negro, 23 especies de aves endémicas de Bwindi, 163 árboles, etc. Este parque nacional abrió al público en el año 1993, permitiendo las visitas a grupos reducidos de personas. Cuando nosotros visitamos la zona permitían el ingreso de 72 personas al día, divididos en ocho grupos, cada uno de estos, solo se puede acercar a una familia de gorilas. Por lo que estos permisos tienen que ser solicitados con varios meses de antelación. El parque está localizado en el extremo suroeste de Uganda, en el borde del Valle del Rift y justo en la frontera con la República Democrática del Congo.
Los gorilas de montaña, en la visita al parque pueden que se dejen ver a unos 30 minutos de caminata o montaña arriba unas 6 h de recorrido, no se sabe donde los verás. Después de registrarnos, ¡obligatorio!, llevar el pasaporte, pagar la tasa de entrada (nosotros ya la teníamos incluida en el safari) en el parque se obtienen las acreditaciones. Si antes de las 15:00 h del día de la visita, no se ha encontrado a los gorilas, hay que comenzar el regreso a la entrada del parque y te dan la oportunidad de regresar al día siguiente, accediendo de forma gratuita.
Los últimos recuentos efectuados indican que hay 880 en el mundo, estando justo la mitad en Uganda, en el Parque Nacional de la Selva Impenetrable de Bwindi y en Parque Nacional de Gorilla Mgahinga, y la otra mitad se encuentra entre el Congo, en el Parque Nacional Virunga y en Ruanda Parque Nacional de los Volcanes, estos viven en libertad. ¿Sabías qué el ser humano comparte el 95% de los genes de este animal?
Este parque cuenta con ocho grupos de gorilas, estos están habituados a ver la presencia de humanos, pero no nos confiemos, son animales, sus movimientos y actuaciones son imprevisibles. ¡Ojo!, este es solo accesible a pie. Para realizar esta visita hay que estar en forma física, personas con movilidad reducida no deben realizarlo. Es muy importante no estar enfermo cuando vas a verlos, ya que podrían contagiarlos. La época de lluvia, de finales de marzo a finales de mayo y noviembre, la zona puede estar muy embarrada. Se debe llevar agua, algún alimento (barrita energética, manzana) un calzado cerrado, de caña alta (para que no entren insectos como hormigas, sanguijuelas, etc.) que no resbale, crema solar, agua, gafas de sol, sombrero, repelente para mosquitos, e impermeable en días de lluvia.
Los precios de entrada de permisos en temporada alta (de junio a septiembre y de diciembre a febrero) es de 600 dólares estadounidenses por persona y día (543,99 € aproximadamente) en temporada baja (el resto de año) es de 450 dólares estadounidenses por persona y día (408 € aproximadamente). ¡Ojo!, tienes que llevar el pasaporte. El precio de entrada es muy caro, pero este dinero es destinado a la conservación del lugar, es una forma de generar ingresos para poder proteger a las especies en peligro de extinción, de los cazadores furtivos, así como de los conflictos armados, la destrucción de su hábitat, etc.
El parque ofrece el servicio de chicos porteadores, transportan durante el trekking las mochilas a los visitantes, tiene un coste de 15 dólares estadounidenses por mochila (13,61 € aproximadamente). Nosotros contratamos a dos. Es una pena, viven en aldeas cercanas del parque y cada madrugada acuden al lugar para a ver si tienen oportunidad de ganarse un dinero.
Acudimos hasta una sala donde dan una pequeña charla sobre el parque nacional, los gorilas de montaña, normas a seguir en la visita, etc.
En el recorrido nos acompañó un guía de Uganda Wildlife Authority, llamado Ngabirand Onesmus, un ranger armado (por si en el camino se nos cruza algún animal peligroso) cuatro portadores, los visitantes: Silvia (nuestra compañera del 4×4), un matrimonio de americanos (que estaban durante un mes recorriendo África), nosotros, y delante de nuestro grupo había salido sobre las 7:00 h de la mañana, dos rastreadores armados, estos son los encargados de localizar a la familia de gorilas que nos han asignado (Nshongi Group) este grupo de primates tienen el nombre del río Nshongi, este fluye en esa área. Ellos llevaban una emisora con la que se iban comunicando con nuestro guía, durante la visita, dándole el punto exacto de la situación de la familia de gorilas.
Los gorilas de montaña (gorilla beringei beringei) se caracterizan por tener el pelo más largo y oscuro que el resto de los gorilas. Sus brazos son más largo que sus patas. Es un animal diurno, sobre todo es herbívoro, su dieta se basa en tallos, hojas y brotes, también cortezas, raíces, flores, frutos, larvas, caracoles y hormigas. Las hembras tienen una gestación de ocho meses y medio, dando a luz a una única cría, rara vez son dos.
Los machos son más altos y pesan el doble que las hembras, entre 204 y 227 kg, miden entre 1,5 y 1,8 metros de alto. Cuando llegan a su madurez sexual, el lomo se les vuelve plateado, a partir de ese momento, estos son los encargados de vigilar los movimientos del resto de gorilas que forman la familia. Es una especie que se encuentra en peligro de extinción, gracias a la creación de los parques nacionales y los programas de protección que han creado los gobiernos, se ha conseguido que la población esté aumentando en los últimos años.
Comenzamos una caminata, donde la niebla estaba presente y la lluvia amenazaba con aparecer ¡qué bien!, cogimos unos bastones para ir apoyándonos durante la caminata, al principio éramos reacios a utilizarlos, pero al final se agradece su uso. ¡Nos libraron de más de una caída! La zona estaba muy pantanosa y resbaladiza, el sendero es irregular, subidas, bajadas, desniveles, charcos, etc. Nos adentrándonos en el bosque impenetrable, caminamos durante 1 h aprox.
¡Al fin llegó la noticia que estábamos esperando!, habían localizado a los gorilas ¡Bien! Ahora, tocaba ir caminando uno de tras de otro. Antes de llegar a la zona, el guía nos dijo: tienen que dejar las mochilas en el suelo, todo excepto las cámaras fotográficas. En ese momento está totalmente prohibido utilizar los bastones, comer, beber, realizar movimientos bruscos, correr, hablar fuerte, etc. ¡Qué emoción!, cuántos años llevábamos soñando con hacer este tipo de viaje, ¡unos cuantos!, pero ese día cumplimos un sueño, de esos tantos que tenemos en la mente. Aquí comenzaba nuestro trabajo, intentar sacar las mejores instantáneas a esta familia de primates ¡Ojo!, no se pueden tomar fotografías con flash. Desde el momento que vimos los gorilas, solo teníamos 1 h para poder estar allí y no nos dejaban acercarnos a ellos a menos de 8 metros de distancia. Tuvimos la oportunidad de ver de cerca a los gorilas de montaña en su hábitat. Nos pareció un turismo sostenible y responsable.
La primera que se dejó ver fue la hembra del grupo, unos pocos metros más adelante estaban dos de sus pequeñas crías, que no paraban, eran muy inquietos, y encontraríamos minutos más tarde, uno más adolescente, por último el que vimos fue el macho del grupo, con su lomo de plata, llegó marcando territorio.
El tiempo se pasó tan rápido que no nos dimos ni cuenta, el guía nos dijo que teníamos que abandonar la zona, había que volver. Emprendimos de nuevo una caminata con una parada en el camino para hacer algunas tomas de grabación. ¡Íbamos más felices!
A cada uno nos dieron un diploma certificado, donde nos acreditaban haber realizado el trekking de Gorilas en el Parque Nacional de la Selva Impenetrable de Bwindi.
A las puertas del parque nos esperaba Peter, subimos en el 4×4 para llegar hasta el hospedaje, allí nos comimos el lunch box, que teníamos pensado comernos en el parque. Peter, se despedía de nosotros, tenía que regresar a la ciudad, entregar los papeles del accidente, etc. Nos pidió que le rellenáramos el formulario y que no hiciéramos mucho hincapié en lo sucedido, que recordáramos los mejores momentos de Uganda.
Pasamos la tarde en el hotel, realizando trabajos con el ordenador, comprobando todas las fotografías que habíamos tomado, etc.
A las 19:00 h acudimos al comedor para cenar, allí estaba el nuevo guía-conductor que nos asignó la empresa. Cenamos, como entrante unas tostadas de tomate con ajo, de plato principal, selección vegetariana de verduras, de postre, un plato de fruta. De bebida un refresco y una botella de agua mineral. Por estas últimas pagamos un total de 5000 UGX (1,23 € aprox.)
A las 8:00 h de la mañana ya estábamos desayunados y con el check-out, abandonábamos el lugar para regresar por carretera a Entebbe, nos esperaba un viaje de 493 km. unas 9 h y 22 minutos. Hicimos varias paradas en ruta para hacer uso del baño, repostar gasolina, almuerzo, etc.
Almorzamos en Kaahwa Kanuzire Restaurant donde nos sirvieron la comida tipo buffet. La dirección es Mbarara Masaka Rd. La parada fue corta para comer, teníamos que seguir haciendo kilómetros.
Paramos donde se encuentra la línea de Ecuador que pasa por Uganda, allí Kalungi (chico africano) nos hizo una demostración del efecto Coriolis. En el hemisferio norte, colocó un recipiente mediante un cubo hecho agua en el recipiente, puso una flor sobre el agua y esta giraba hacia la derecha. Nos colocamos unos metros más abajo en el hemisferio sur, volvió a hacer el mismo proceso y la flor estaba vez giraba hacia la izquierda. Nos colocamos justo debajo de la línea imaginaria del ecuador, y no se produjo ningún movimiento.
Continuamos con el viaje y bajamos en la puerta del African Roots Guest House donde pasaríamos unas pocas horas, escogimos este hospedaje de tres estrellas, más bien para descansar, darnos una ducha, etc. ¡Fue un error!, hubiera sido mejor irnos directamente al aeropuerto y esperar allí. Habitaciones muy viejas, sucias, una gran cantidad de mosquitos, no hemos visto tantos en todo el país como en este hospedaje, ¡allí íbamos a pillar la malaria! Ofrece wifi gratis y parking. El check-in a partir de las 10:00 h, el check-out de 4:30 h a 11:00 h. Por la estancia pagamos un total de 70 €. Se encuentra a 7 km del aeropuerto internacional de Entebbe. La dirección es 8 Left Lane, Manyago Entebbe.
A las 1:30 h de la mañana nos fuimos hacia el aeropuerto, el traslado nos lo hizo el propio hospedaje. Bajamos en la puerta del aeropuerto Internacional de Entebbe, tuvimos que mostrar el pasaporte a la entrada al policía, buscamos los mostradores de la compañía aérea Turkish Airlines, para facturar las mochilas. Pasamos el control de seguridad y luego el de aduana, donde el policía nos colocó el sello de salida del país, esperamos a la hora de embarque, el vuelo salió con 1 h. de retraso. Subimos a la aeronave, tuvimos un viaje de 6 h y 20 minutos. Las azafatas sirvieron comida y refrescos.
Pasado ese tiempo, aterrizamos en el aeropuerto Internacional de Estambul. Aquí teníamos una escala de 3 h que se quedó en 2 h por el retraso que llevábamos. De nuevo pasamos un control de seguridad y escáner, aunque éramos pasajeros de tránsito. Volvíamos a subir en otro avión de la misma compañía aérea con destino a Madrid. El viaje fue de 4 h y 40 minutos. Durante él, la tripulación del avión dio comida y bebidas. Por estos pasajes pagamos un total de 670 € por persona.
Aterrizamos en el Aeropuerto Internacional Adolfo Suárez Madrid Barajas, bajamos del avión, pasamos el control de pasaporte (por la máquina) es más rápido que en la ventanilla de policía, acudimos hasta las cintas de equipaje, salimos del aeropuerto. Llegamos hasta la zona de parada del autobús del parking de larga estancia Aena T 1,2, 3, subimos en él, este nos llevó al parking, allí teníamos estacionado el vehículo. Subimos a nuestro coche e iniciamos un viaje a casa de 562 km, una conducción de 5 h y 40 minutos.
Información útil:
Los ciudadanos españoles necesitamos visado para poder entrar en Uganda, pudiendo tramitarse en el Aeropuerto Internacional de Entebbe, cuando se llega al país, en las principales fronteras terrestres y últimamente es posible a través de internet. Nosotros lo realizamos vía online, se rellena un formulario, hay que escanear una foto tamaño carnet y la cartilla amarilla de vacunación internacional, donde indica que tienes puesta la vacuna de la fiebre amarilla. Se realiza el pago de 50 dólares estadounidenses por persona (44,26 € aprox.) una vez solicitado, en un plazo corto, recibirás un correo electrónico con la aprobación o denegación de la visa. Este documento debes imprimirlo y presentarlo a tu llegada en el control de inmigración, junto con el pasaporte y tarjeta de embarque. Aquí os dejamos la página web: https://visas.immigration.go.ug Nosotros solicitamos la visa por 10 días. ¡Recuerda!, el pasaporte tiene que tener un vigor de al menos seis meses de validez, desde la entrada en el país.
El consulado de Uganda en España se encuentra en Badalona (Barcelona) Calle Bartolomé 2-8 10º 1ª, Badalona. Para más información visitar la página web: https://ugandainspain.webs.com
El consulado de España en Uganda, localizado en la ciudad de Kampala (Uganda). La dirección es Baskerville Avenue Kolobo, el teléfono de contacto es: +256 (04)414342372.
Se debe evitar visitar la región de Karamoja, en el noroeste del país y los desplazamientos a la frontera con la República del Congo. Estos datos lo hemos recopilado durante el periodo de nuestro viaje. Es aconsejable antes de viajar a Uganda, visitar la página de Ministerios de Asuntos Exteriores y de Cooperación: https://www.exteriores.gob.es/es/ServiciosAlCiudadano/Paginas/Detalle-recomendaciones-de-viaje.aspx?trc=Uganda
El nivel de alerta terrorista es elevado en todo país, en la ciudad de Kampala, sobre todo en los principales puntos turísticos y hoteles.
La moneda es el chelín ugandés (UGX) Hay monedas de 50, 100, 200, 500 y 1000 USh, y billetes de 1000, 2000, 5000, 10000, 20000 y 50000 USh. 1 €= 4197,66 chelines ugandeses. En algunos locales incluso aceptan el dólar estadounidense, aunque siempre es mejor utilizar la moneda local.
Solo aceptan las tarjetas de crédito en hoteles y restaurantes, frecuentados por turistas. Los hoteles suelen aceptar los dólares estadunidenses y euros, como norma general. ¡Recuerda!, no se debe llevar mucho dinero encima, ni ponerse joyas, relojes que puedan llamar la atención.
El idioma oficial es el inglés y suajili, aunque hay más de 40 lenguas.
Es obligatorio estar vacunado de la fiebre amarilla, esta vacuna tenía una validez durante 10 años, la OMS en julio de 2016 comunicó que es vitalicia, si la tienes puesta ya no tendrás volver a ponértela más. Se deben tomar las patillas contra la malaria. Es recomendable estar vacunado de la Hepatitis A y B, tétano–difteria, polio y cólera. Para más información visitar la web del Ministerio de Sanidad: https://www.sanidad.gob.es
Llevar un pequeño botiquín con algún: analgésicos, antihistamínicos, antidiarreicos, repelente para mosquitos, calmante para picaduras de mosquitos, tiritas, y si se tiene alguna medicación habitual, crema solar, etc.
Es aconsejable viajar con una póliza de seguro, que tenga cobertura de los posibles riegos que puedan ocurrir durante el viaje ¡Recuerda! Uganda no es Europa, los hospitales y las clínicas son más rudimentarias y están menos preparados.
¡Ojo!, siempre beber agua embotellada, los alimentos crudos, deben estar bien lavados, evitad el consumo de hielo, e incluso el enjuague bucal.
La corriente eléctrica es de 220/50 Hz, son enchufes de tres clavijas, se necesita un adaptador.
Uganda aún es un destino poco explotado y visitado por viajeros y turistas, esto hace que mantenga todo su esplendor.
¿Cuándo viajar a Uganda?, cuenta con dos temporadas, seca y lluviosa. La mejor fecha para visitar Uganda es de junio a septiembre, es cuando las precipitaciones son mínimas y no hace demasiado calor. Aunque en las montañas Rwenzori, se caracteriza porque llueve 350 días al año.
En Uganda se conduce por la izquierda, se necesita tener el carnet de conducir internacional, además de una tarjeta de crédito. Si decides alquilar un coche, aconsejamos que lo hagas desde casa, vía online, ahorrarás tiempo, aunque también hay la posibilidad de alquilar a tu llegada en el aeropuerto, encontrarás varias empresas internacionales de alquiler de vehículos. El alquiler de coche con conductor. Contratado un paquete safari, etc.
Este ha sido nuestro paso por el país de Uganda, donde hemos disfrutado mucho de paisajes de naturaleza, flora, fauna, y también nos llevamos un millón de anécdotas, incluyendo un accidente de tráfico. ¡Hasta pronto! África… Un saludo andorreros, nos vemos muy pronto.
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